“Alberto Ginastera. Malambo
truculencia y legado”: un ensayo
visual, documental y sonoro
sobre el gran compositor
argentino
El Museo
Municipal de Artes Visuales “Sor
Josefa Díaz y Clucellas” recibe
la muestra itinerante “Alberto
Ginastera. Malambo truculencia y
legado” que difunde la vida y
obra del gran compositor
argentino. La inauguración será
el miércoles 21 de diciembre a
las 18, en el espacio de San
Martín 2068. Organiza
Subsecretaría de Cultura de
Ciudadana y Dirección Nacional
de Investigación Cultural del
Ministerio de Cultura de la
Nación, con el apoyo del
Gobierno de la Ciudad de Santa
Fe.
Durante 2016 el Ministerio de
Cultura de la Nación, a través de
la Subsecretaría de Cultura
Ciudadana y la Dirección Nacional
de Investigación Cultural, realizó
la muestra itinerante “Alberto
Ginastera. Malambo truculencia y
legado”, que rinde homenaje al
centenario del nacimiento del gran
compositor argentino. La propuesta
fue elaborada por un equipo
interdisciplinario que trabajó
desde la historia cultural, la
investigación en archivos, el
diseño gráfico y la gestión
cultural; y llegó a diferentes
puntos del país. El primer destino
fue el Centro Cultural
Universitario de la Universidad
Nacional del Nordeste de la Ciudad
de Corrientes; y el segundo, el
emblemático Conservatorio de
Música Gilardo Gilardi en La
Plata. Este miércoles a las 18, la
exposición llega al Museo
Municipal de Artes Visuales “Sor
Josefa Díaz y Clucellas” (San
Martín 2068), con la colaboración
de Cerveza Santa Fe. El mismo día,
pero a las 21, habrá un concierto
del Ensamble #GinasteraAl100 junto
a Ligia Piro, en el Paraninfo de
la UNL.
La exposición, que cuenta a nivel
local con el apoyo del Gobierno de
la Ciudad, “busca acercar a la
gente, la vida y obra de Alberto
Ginastera desde una experiencia
visual, documental y sonora, a
través de un contexto cronológico
y temático, y darle visibilidad al
patrimonio musical. Se propone
además un recorrido por la vida y
la obra de uno de los compositores
más destacados de la historia
musical argentina, desde su
infancia en el barrio porteño de
Barracas hasta su despedida final
en la lejana ciudad de Ginebra”.
Ensayo visual, documental y
sonoro
“Alberto Ginastera. Malambo
truculencia y legado” incorpora
documentos mecanografiados,
partituras originales, fotografías
de sus puestas escénicas en el
Teatro Colón, imágenes de sus
lugares, ciudades y de sus
contemporáneos; además de primeras
o raras ediciones de vinilos, que
también se pueden escuchar. El
resultado de la exhibición es un
ensayo visual, documental y
sonoro, en parte cronológico y en
parte temático. Buscando en ambos
casos, visibilizar el patrimonio
musical, y esto gracias a los
aportes de personas e
instituciones públicas y privadas
que cedieron sus materiales y sus
conocimientos: el Instituto de
Musicología Carlos Vega, los
Archivos de la Universidad
Torcuato Di Tella; la Hemeroteca,
Audioteca y Área de colecciones
particulares de la Biblioteca
Nacional; la Paul Sacher Stiftung
de Basilea, el Archivo Histórico
de la Ciudad de Buenos Aires y el
Departamento de Documentación del
Teatro Colón.
Sobre el compositor
Alberto Ginastera nació en Buenos
Aires, en 1916; y falleció en
Ginebra, en 1983. Talento precoz,
realizó sus estudios musicales en
el Conservatorio Nacional de
Buenos Aires bajo la tutela de
Athos Palma y José André, y con el
tiempo fue nombrado director del
Conservatorio de La Plata. Fundó
el Centro Latinoamericano de Altos
Estudios Musicales y la Facultad
de Ciencias y Artes Musicales de
la Universidad Católica de
Argentina.
Sus primeras producciones se
enmarcan en una estética
nacionalista que se inspira en el
folclore argentino, pero con
elementos rítmicos y tímbricos
tomados de la vanguardia. Los
ballets Panambí y Estancia son las
partituras más representativas de
esta etapa inicial. En 1946 se
trasladó a Estados Unidos, donde
recibió orientaciones de Aaron
Copland. Con
posterioridad, el lenguaje de
Ginastera abandonó los ritmos y
las melodías de su tierra para
integrar técnicas como el
dodecafonismo, la aleatoriedad y
la microtonalidad. En esta línea
se inscriben su concierto para
arpa (en cuyo tercer movimiento es
todavía perceptible cierto influjo
de motivos melódicos argentinos),
el de violín y los dos para piano
y para violoncelo. Sus obras
instrumentales más relevantes son
Obertura para el Fausto Criollo
(1943), Sinfonía elegíaca (1944),
Cuartetos núm. 1 y núm. 2 (1951,
1958), Sonata para piano (1953) y
Variaciones concertantes (1953),
conocida como ballet con el título
de Tender Night, con coreografía
de John Taras.
Escribió 12 canciones en dos
suites de tres diferentes momentos
de su vida, todas para piano y
voz; algunas con letra de la
escritora Silvina Ocampo. Además
fue el primer maestro de Astor
Piazzolla.
Compuso varios conciertos para
instrumentos solistas y orquesta.
De su música vocal destacan
Hieremiae prophetae lamentationes
(1946) para coro mixto, la Cantata
para América mágica (1961) para
soprano y percusión, y Milena
(1970), con texto de Kafka. Cabe
destacar también sus óperas Don
Rodrigo (1964), Bomarzo (1967) y
Beatrix Cenci (1971).