ADN
Explican
el trasfondo científico del encuentro de Carlotto y su
nieto
El hallazgo de la filiación
entre Estela de Carlotto y su nieto conllevó un recorrido que fue posible
gracias al avance de las técnicas genéticas. Especialista de la UNL explicó cómo
se determina el denominado “índice de abuelismo”.
¿Cuál
fue el trasfondo científico del encuentro de Estela de Carlotto con su nieto
Guido luego de 36 años? Esteban Rosso, especialista en ADN y Rastreo de Datos de
la Universidad Nacional de Litoral (UNL), explicó cómo se determina el
denominado “índice de abuelismo”, que fue fundamental para determinar la
filiación.
“El
interés de las Abuelas de Plaza de Mayo fue siempre encontrar a sus nietos
desaparecidos, pero los padres no estaban presentes y en su momento no se
disponía de las técnicas para determinar el vínculo en forma directa. Las
herramientas de ese momento permitían el análisis directo para determinar el
vínculo de un padre con su hijo, pero no entre un abuelo y un nieto. Frente a
esa imposibilidad comenzó la búsqueda de ayuda nacional e internacional. Fue así
que las Abuelas se contactaron con un genetista exiliado en Estados Unidos, que
a su vez los conectó con una especialista en Estadística aplicada a los estudios
de filiación, que fue quien pudo desarrollar los cálculos para poder relacionar
la información genética de los abuelos con la de los posibles nietos y tratar de
lograr esa vinculación y establecer el denominado ‘índice de abuelismo’”, indicó
Rosso, docente de la Cátedra de Biología Celular y molecular de la Facultad de
Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB) de la UNL.
En
este sentido, acotó, la gran relevancia de estos casos reside en poder vincular
dos filiaciones, pero faltando los padres, posible gracias los avances en
materia genética: “tengamos en cuenta que una persona posee la mitad de su
información genética que le dio su padre biológico y la mitad que le dio su
madre biológica, una información organizada de a pares. A su vez, nuestros
padres recibieron su información genética de nuestros abuelos de la misma
manera. Por lo tanto, mi información genética, si yo fuera el nieto en cuestión,
debería ser compartida de la siguiente manera: la mitad con la información
genética de mis abuelos paternos y la otra mitad con la de mis abuelos
maternos”, especificó.
Entonces,
según el especialista, los niveles de abuelismo se pueden determinar en un
índice del 99,9 por ciento, igual al que se establece de padre a hijo, es decir,
de paternidad. “En este caso particular (el del nieto de Estela de Carlotto) se
logró ese índice debido a que la información genética con que se contaba
pertenecía al padre desaparecido, Walmir Oscar Montoya, y de Laura Carlotto
(hija de Estela). Era una información completa sobre la cual se podía buscar”,
anotó.
“La
búsqueda de Estela de Carlotto a su nieto le fue llevando a contactar la familia
de quien podría haber sido la pareja de su hija. En función de ello,
convencieron a los padres para que aporten material genético por medio de una
muestra de sangre, que fue guardada en el Banco Nacional de Huellas Genéticas
del Hospital Durand, banco que ahora fue tomado por el Ministerio de Ciencia y
Técnica de la Nación, que a su vez lo maneja la Comisión Nacional de Derecho a
la Identidad”, continuó.
Según
agregó, cuando se comenzaron a realizar estos estudios, en 1984, se disponía de
unos pocos “marcadores” para determinar las filiaciones: “Hoy se dispone de
marcadores de ADN y del estudio en particular de ADN mitocondrial, que determina
la matrilínea. Esto significa que todos los descendientes de una misma mujer
comparten la misma información genética en el ADN mitocondrial. En ese pasado se
podría haber estudiado el ADN mitocondrial de Guido enfrentado con el de todas
las abuelas que podrían estar en el banco de datos. Si hubiera coincidido, se
podría haber asignado que existe relación o vínculo con esa mujer”, finalizó
Rosso en declaraciones al programa El Cuarto Poder
(LT10).